El Campello conserva todavía el sabor de un pequeño pueblo marinero, a pesar del creciente desarrollo turístico que ha tenido en los últimos años.

  La playa, con el paseo marítimo "El Carrer de la Mar" y los típicos calderos de arroz y pescado hacen de esta localidad un atractivo lugar de descanso y tranquilidad.

  A las afueras de Campello se encuentra la Illeta dels Banyets, lugar de gran interés arqueológico donde existen restos de antiguos asentamientos ibéricos y romanos. Se levanta en esta zona una torre vigía del siglo XVII.

  Campello posee diversas calas así como pequeños acantilados, como la coveta Fumá, la cova del Llop Mari, etc.